jueves, 22 de enero de 2009

For the most dearest departed

She, who is still one of the most important women in my life, just lost someone she loves. It is my time to pay and be there with her, as she was for me. On Saturday, the family will hold a funeral mass, which we all will attend; I hate such to be the reason to meet her once again.
And even though I know her feeling about it, for sure I will be horribly unable to say a word, as it has always been.
For that I am sorry. And sad.


9 comentarios:

Palomilla Apocatastásica dijo...

Claro ¡Salú por Oliverio Girondo! Curioso pero hoy supe de alguien que declaró: Tengo una mujer que sabe volar.
En fin, creo que fue "alentadora" y enriquecedora tu experiencia, especialmente si atraes tanto como la maquetita de Lego.
Ah, yo no estudié literatura, solo ando revoloteando por aquí y por allá.

Julián Iriarte (bueno, ya: Oliver) dijo...

Presumo y sólo presumo que este comentario estaba destinado a mi juramento; pero como presumo que entiendo, entonces no hace falta apuntar nada más.
En lo que a mí respecta, no lo vi nada alentador (salvo el comentario de Carmen), sino "desafiante", y precisamente por eso -necio como soy- juro que me quedo en mis libros.
Y la pregunta que sólo mis ingenieritos de Lego podrían hacer: si revoloteas, ¿vuelas?

Palomilla Apocatastásica dijo...

Pues efectivamente, no era un comentario para este texto. Aveces se vuela, otras sólo se revolotea...lo dejo a la imaginación.

Julián Iriarte (bueno, ya: Oliver) dijo...

Peligrosísimo dejar las cosas a la imaginación... en ocasiones.

Palomilla Apocatastásica dijo...

Al contrario, la imaginación es el límite. Precisamente anduve buscando un Expansor de Horzontes.

Entonces cuando hube de buscar una definición que me pareciera adecuada a esos términos, me di cuenta de que es mejor dejarlo a la imaginación.

Y vieras que si me resultó

Julián Iriarte (bueno, ya: Oliver) dijo...

La cosa es que hay imaginaciones que tienen otros límites, van en otras direcciones, llegan a muy diferentes puertos y se tuercen en muy variados caminos.
Y lo más lindo de todo es que siempre hay imaginaciones afines, y harto más interesantes. Ahí están las grandes cosas, cuando ésas se juntan.

Palomilla Apocatastásica dijo...

Se llama CAUSAlidad, todo es un producto causal, aún cuando no tengamos una pista de dónde comienzan a atarse los cabos para que las causas tomen su propio cauce.

Julián Iriarte (bueno, ya: Oliver) dijo...

¿Existe la casualidad? Según yo, ni los accidentes topográficos son tal...
Related to the Formula thing up there.

Palomilla Apocatastásica dijo...

definitivamente la casualidad no existe, sólo la causalidad...