viernes, 22 de agosto de 2008

Un posible epíteto heroico

El domingo por la noche, oyendo uno de los pocos programas de radio que me parecen extraordinarios: "Hace poco llegué a la conclusión de que la nostalgia es un sentimiento comprobatorio de que alguna vez fuimos felices". Con esa frase cerró la emisión. Después vino la hora nacional, y lo más prudente fue irme a dormir: dudo que haya algo más aburrido en la radio mundial.
Si me atengo a la etimología, el término refiere al dolor sentido por el deseo de volver a casa. ¿Será, entonces, Ulises el nostálgico por excelencia y antonomasia? ¿Debió Homero considerar, entre sus muchos epítetos, "el del corazón que anhela" o "el que añora el hogar"? Por sobre las demás, la mayor cualidad de Ulises es la astucia; sin embargo, su nostalgia por Ítaca y Penélope lo mantiene en el periplo, muy a pesar de pasarse siete comodísimos años con Calipso (el hijo que tienen da fe que mal no la pasaron), muy a pesar de echarse al hombro a Poseidón y a Eolo y a Helios y a Zeus en determinado punto, muy a pesar de perder a su tripulación entera y naves, muy a pesar de que Nausicaa (como todas las mujeres de Homero, bella como ella sola y ninguna más) se enamorara de él y le insinuara el reino de Antinoo. El heroísmo de Ulises quizá se traduzca en las implicaciones y los alcances de su nostalgia.
Sin embargo, especulo que la cosa va más lejos. ¿Sólo se vuelve a casa? ¿A qué se vuelve, qué se desea?
Si la nostalgia sólo nos comprobara que alguna vez fuimos felices, entonces se excluye otro momento, que a posteriori provoca el mismo dolor, sino es que uno más grave casi por ser más estúpido. ¿Y qué si eso que duele no es el tiempo de felicidad ido, sino la expectativa de que se pudo haber sido feliz?
Quizá en un escondido reducto me queda la esperanza de que todavía no sea así.

6 comentarios:

Xotlatzin dijo...

"Durante 27 años seguí su consejo, pero ayer me lo salté, me arriesgué…

Volví.

Volví a dónde había sido feliz y volví a ser feliz.

Sabina, vete a la mierda."

breavman.

Julián Iriarte (bueno, ya: Oliver) dijo...

Cada quien tiene su Ítaca, me cae... Y sí, Sabina: vete a la mierda.

Anónimo dijo...

¡Ay, feliz, feliz! Será contento, esperanzado, adaptado...
La felicidad es tan del instante... Quizás ni siquiera llegue al "momento", como tú diferenciabas en un comentario de por aquí.
Bien, con los años y la búsqueda (puede ser la alegoría del viaje de Ulises), casi siempre uno tiene que amar su vida tan trabajosa y, por ello querida y apreciada.
Así que siempre valoraremos gratamente nuestro pasado. Por eso se dice "Cualqluier tiempo pasado nos parece mejor".
Yo le digo a mi hija que siempre es mejor estudiar algo que nada. Por poco que vivamos, por poco que creamos haber hecho, siempre es más que no haber vivido . Por tanto, nuestro pasado es una nota , una huella de vida más valiosa que cualquier pasividad, si es que la pasividad es posible . También creo que no podemos estar pasivos mientras tenemos vida porque pensamos, sentimos, dudamos, nos preparamos para una respuesta mejor.
Bien, Aunque tengo bastantes años, también tengo mi rebeldía juvenil porque la búsqueda de la verdad nos hace libres y niños.
Muchos besos. Te dejo con bastante dosis de felicidad por haberme permitido expresar y comunicar algo de mi filosofía de sentido comun.
Me gusta por ser algo comun. Es decir, compartido.
Bueno, no quiero ser anónima . Firma: Concha.

Julián Iriarte (bueno, ya: Oliver) dijo...

Creo que no hablamos de la misma cosa. O no he sido claro y se me leyó de otra manera.
Recordemos que este blog es perversamente subjetivo, y si bien para algunos la felicidad es un instante evanescente y acotado en el tiempo, para mí es una experiencia que obedece más a las leyes de la relatividad -al más puro estilo de la física de Einstein- que a la geometría euclidiana.
¡Qué terrible es explicar una emoción en términos matemáticos! En fin, si Barthes pudo analizar una pasión desde la semiótica, quizá no sea tan descabellado.

Xotlatzin dijo...

".. transformar todo «Fue» en un «Así lo quise yo» ¡sólo eso sería para mí redención!"

Friedrich Nietzsche en Ecce homo (Cómo se llega a ser lo que se es).

¿redención = felicidad?

Saludos.

Julián Iriarte (bueno, ya: Oliver) dijo...

Quizá para algunos sea así. Sigo averiguando si es mi caso.
Abrazo